Puce Mary

Esta artista danesa es una caja de sorpresas. A pesar de ser una compositora muy joven y no tener éxito comercial, muchos músicos han trabajado con ella en sus producciones como Croatian Amor, Body Sculptures, etc. Revisando su trabajo notamos que Frederikke (su nombre real) ha desarrollado un estilo intrincado, que en algunos casos el lenguaje musical se vuelve completamente hermético y muy difícil de entender y escuchar. Sin embargo, Puce Mary tuvo éxito con esta pieza llamada “The Drought” de 2019, donde mezcla un estilo industrial clásico, evocando a Throbbing Gristle (Rotor, 2019), muy lejos del paradigma industrial actual de poder y nihilismo. Puce Mary, por el contrario, transforma el sonido Industrial en paisajes etéreos, pistas interconectadas con guiños a los trabajos actuales de Eno (Martin-McCormick, 2018) y lenguaje cinematográfico literal. Esta área es completamente familiar para Puce Mary, ya que ha trabajado en algunas aclamadas producciones cinematográficas para Cannes y Berlín.

Este álbum de cuarenta y cuatro minutos, abre con “Dissolve” y continúa inmediatamente con “A feast Before the Drought”. Ambas son obras ambientales que recrean una banda sonora de suspenso. La estructura de Throbbing Gristle se percibe fácilmente con cuerdas de fondo, sirenas y un ambiente caótico. “To Possess Is To Be In Control” es un ejercicio vocal oscuro mezclado con un muro de ruidos. Es un lamento vocal de fondo acompañado de un sonido distorsionado estilo Eintürzende Neubauten.

Un ruido constante e incómodo introduce “Fragments of a Lily”, un tema donde Puce Mary despliega su furia y marca el inicio de una historia enigmática, donde además el primer instinto es continuar con el resto del álbum y no parar. “Red Desert” finalmente muestra el verdadero gesto artístico de la obra maestra: la real pincelada de Puce Mary. “Coagulate” regresa a la oscuridad del alma del disco y con “Slouching Uphill”, el último tema, Puce Mary cierra la actuación con un collage industrial. Una vez más, el paradigma clásico del industrial: Genesis P. Orridge o el toque de Monte Casazza.

Este disco ha sido muy bien recibido por la crítica y el trabajo de Frederikke merece este reconocimiento. A pesar de los toques noise, el álbum encuentra un equilibrio perfecto en la producción y los elementos logran crear una atmósfera de calma. El oyente no necesita forzar la concentración ni la imaginación para seguir el discurso. No hay jerga ni códigos clave; sin embargo, el oyente debe tener cierta familiaridad y conexión con el género. De lo contrario, permanecería desorientado durante todo el álbum.
Un trabajo bueno y muy interesante para disfrutar y descubrir nuevas producciones alternativas.

This Danish musician is a surprise box. Even though, she is a very young composer and not commercially success, many musicians have worked with her in their productions such as Croatian Amor, Body Sculptures, etc. Reviewing her work we notice Frederikke (her real name) has developed an intricated style, which is some cases the musical language becomes completely hermetic and very difficult to both understand and listen to. However, Puce Mary succeeded in this piece of work named ‘The Drought’ form 2019, where she mixes a classic Industrial style, evoking Throbbing Gristle (Rotor, 2019) away from today’s industrial paradigm of power and nihilism. Puce Mary on the contrary transforms the sound in ethereal landscapes, interconnected tracks with signs to Eno’s current releases (Martin-McCormick, 2018) and literal cinematographic forms. This area is fully familiar to Puce Mary as she has worked in some acclaimed Cannes and Berliners film productions.

The forty four minute album opens with ‘Dissolve’ and continues immediately with ‘A feast Before the Drought,’ both are ambient works which are a thriller soundtrack. The Throbbing Gristle’s structure here is easily detected with background strings, sirens, and a chaotic ambient.
‘To Possess Is To Be In Control’ is an obscure vocal exercise mixed with a wall of noises. It’s a background voice lament along with a distorted Eintürzende Neubauten sound style.
A constant and uncomfortable noise introduces ‘Fragments of a Lily,’ a track where Puce Mary displays rage and the first break in an enigmatic story, here the first instinct is to go on with the rest of the album and don’t stop. ‘Red Desert’ finally shows the real artist gesture of the masterpiece, it’s Puce Mary’s brush-stroke. ‘Coagulate’ returns to the darkness of the record’s soul and with ‘Slouching Uphill’ the final track, Puce Mary closes with an Industrial collage the performance. Once again, it’s the classic Industrial paradigm: Genesis P Orridge or Monte Casazza’s touch.

This record has been well received by critics, and Frederikke’s work deserves this recognition. Despite of the noise sound layers, the album finds an exact balance in the production and the elements reach to create a calm environment. The listener doesn’t need to force the concentration or the imagination to follow the speech. There is not any jargon or key code, the listener should have certain familiarity and connection with the genre, though. Otherwise, he or she would remain clueless for the whole album.
Good and very interesting work to enjoy and discover new alternative productions.

https://puce-mary.bandcamp.com